Tú eres mi TODO más que cualquier tesoro.
Tú eres el luminoso más que todos los brillantes.
Yo podía, como todos, agradarte y tener alguien que me agradara;
Yo podía, como muchos, pertenecerte y tener alguien para mí;
Yo podía, como tantos, afirmar “soy tuya” y también decir: “eres mío, eres mía”.
Yo podía, como cada persona, ser escogida y escoger;
Yo podía, como libre, decidir sin preguntar tu querer.
Pero yo quise gritar que soy de todos y tuya,
Yo quise afirmar que nada es mío;
Yo quise declarar que no me pertenezco;
Yo quise preferir tu voluntad a mi querer;
Yo quise ser escogida por Ti sin escoger;
Yo quise optar por un amor que me hace amar;
Yo quise entregarme, dedicarme, donarme;
Y ahora veo al darme tantos se sirven de mí;
Al pertenecerte muchos me poseen;
Al seguirte todos se liberan;
Al escogerte algunos me prefieren;
Al separarme las multitudes me cercan;
Al estar sola ALGUIEN piensa en mí…
Autor: Padre Ignacio Larrañaga
viernes, 30 de abril de 2010
miércoles, 28 de abril de 2010
Ofrecimiento diario
sábado, 24 de abril de 2010
martes, 20 de abril de 2010
NUNCA TE DETENGAS
Siempre ten presente que: la piel se arruga, el pelo se vuelve blanco,
los días se convierten en años.
Pero lo importante no cambia, tu fuerza y tu convicción no tienen edad.
Tu espíritu es el plumero de cualquier tela de arana,
detrás de cada línea de llegada, hay una de partida;
detrás de cada logro, hay otro desafío.
Mientras estés vivo, siéntete vivo; si extrañas lo que hacías, vuelve a hacerlo.
No vivas de fotos amarillas, sigue aunque todos esperen que abandones.
No dejes que se oxide el hierro que hay en ti.
Haz que en vez de lastima, te tengan respeto.
Cuando por los años no puedas correr, trota;
cuando no puedas trotar, camina;
cuando no puedas caminar, usa el bastón.
Pero nunca te detengas…
Madre Teresa de Calcuta
Suscribirse a:
Entradas (Atom)